Cuando uno pasa tantas horas metido en un autobús acaba haciendo cosas raras. Como, por ejemplo, sacar una imagen del Santísimo y ponerse tranquilamente a rezar.
Pero no es fácil concentrarse en la oración en un autobús, con una compañera de asiento hablando por teléfono, el conductor escuchando radiolé... Y yo me iba quejando al Señor: "Así no hay manera. Sabes que tengo la capacidad de atención de un canario harto de café. Como no me ayudes, no puedo."
Justo en ese momento ha empezado a sonar en la radio esta canción. ¿Se te ocurre una oración más preciosa para el día de Navidad?
Para tu amor lo tengo todo
Desde mi sangre hasta la esencia de mi ser
Y para tu amor que es mi tesoro
Tengo mi vida toda entera a tus pies
Y tengo también un corazón
Que se muere por dar amor
Y que no conoce el fin
Un corazón que late por vos
Para tu amor no hay despedidas
Para tu amor yo solo tengo eternidad
Y para tu amor que me ilumina
Tengo una luna, un arco iris y un clavel
Y tengo también un corazón
Que se muere por dar amor
Y que no conoce el fin
Un corazón que late por vos
Por eso yo te quiero tanto
Que no sé como explicar lo que siento
Yo te quiero porque tu dolor es mi dolor
Y no hay dudas yo te quiero
Con el alma y con el corazón
Te venero hoy y siempre
Gracias yo te doy a ti mi amor
Por existir
Para tu amor lo tengo todo, lo tengo todo
Y lo que no tengo también, lo conseguiré
Para tu amor que es mi tesoro
Tengo mi vida toda entera a tus pies
Y tengo también un corazón
Que se muere por dar amor
Y que no conoce el fin
Un corazón que late por vos
Por eso yo te quiero tanto
Que no sé como explicar lo que siento
Yo te quiero porque tu dolor es mi dolor
Y no hay dudas yo te quiero
Con el alma y con el corazón
Te venero hoy y siempre
Gracias yo te doy a ti mi amor
martes, 25 de diciembre de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario